En este artículo veremos que la pereza es algo natural en el ser humano y descubriremos consejos prácticos para aplicarlos en el día a día.
La pereza se ha impuesto con más fuerza desde la nueva era del contenido rápido en las redes sociales, pasamos horas consumiendo contenido innecesario a cambio de lo más valioso, nuestro tiempo.
Según un estudio con ratones de la universidad McMaster en Canadá, vieron que algunos carecían de los 2 genes de proteína AMPK, en general a los roedores les encanta correr, pero los que carecían de estos genes aguantaban menos kilómetros que los otros y paraban antes. Esta proteína se pone en marcha cuando hacemos ejercicio, para llevar azúcar y oxigeno al musculo. Los ratones más “perezosos” tenían menos niveles de mitocondrias y de esa manera a sus músculos les costaba mas absorber la glucosa durante el ejercicio. Lo curioso es que cuando hacemos deporte de manera regular este número de mitocondrias aumenta y viceversa por lo que las personas sedentarias van a tener que esforzarse más, hasta que se generen las suficientes adaptaciones.
Ahora bien, sabemos que la falta de un habito nos complica el ser perseverantes ¿Qué podemos hacer para no fracasar en el intento? Lo primero, pongamos algunas cosas en contexto…
Imagínate que hay una guerra y no tienes nada para comer … ¿Te permitirías estar tumbado en el sofá durante horas viendo Netflix? O ¿Levantarías el culo y te pondrías a buscar maneras para llevarte algo a la boca?
Muchas veces el cambio sucede, solo cuando tenemos la “necesidad” por que hemos tocado fondo, en cualquier caso sucede cuando estamos realmente convencidos desde lo más profundo de nuestro ser, que queremos lo que anhelamos. Si a nivel subconsciente eres capaz de creerte lo que quieres conseguir, de manera automática tomaras acción, por el contrario si tu deseo no es lo suficientemente fuerte lo mas natural es que abandones.
Tu actitud habla más de ti, que lo has conseguido aun que a la larga son cosas que se retroalimentan, por lo tanto si tu actitud es algo que controlas tú, la buena noticia es que puedes cambiarlo desde ahora mismo. ¿Cómo?
Poco a poco, para ello puedes usar la visualización, ¿Cómo te gustaría ver en 2 años? ¿Qué cambiarias, para lograrlo? Hay una cosa clara y es que si sigues actuando como hasta ahora y no has logrado lo que querías, habrás de hacer cosas diferentes y eso es lo que te has de preguntar cada día y actuar en consecuencia.
El conocimiento nos hará más perseverantes o herramientas como la visualización pero nadie puede escapar del trabajo duro y de la disciplina, al principio cuesta más, pero desconfía del que te diga lo contrario, además…Nada te va a cansar más que no esforzarte, porque si tú te esfuerzas te vas a cansar, pero si no lo haces vas a tener que enfrentarte a los resultados de una vida que no has elegido y a la larga eso cansa más.
CONSEJOS PRÁCTICOS
– Ponte objetivos concretos, con fecha límite para cumplir y sé consciente que ser disciplinado, va más allá de lograr algo. Ser disciplinado es un logro en sí mismo, te permitirá cambiar tu vida a todos los niveles. Personalmente, me obligo a hacer lo que quiero mediante premios y castigos, pues seré merecedor de ciertos privilegios solo cuando me lo haya ganado, el hecho de fallarme a mí mismo ya genera en cierta manera un castigo, dejando una sensación muy desagradable, finalmente si procrastino me privaré de ciertos placeres del día a día. Tú mismo puedes crear los tuyos.
– Ponte objetivos reales y baja el nivel de dificultad. La excelencia es hacer algo bien suficientes veces durante mucho tiempo. Si te propones hacer 20 ejercicios en el gimnasio cada día, es probable que procrastines e incluso lo dejes, en cambio, a lo mejor eres capaz de hacer 5 ejercicios, superconcentrado y bien, eso es lo importante Y lo mismo para las tareas complejas como “escribir un libro” plantéate hacer una página al día en vez de un capítulo y crea estrategias eficaces para ti, a medida que vayas evolucionando serás más eficiente y estos objetivos irán cambiando.
– Toma acción, solo hazlo, como sea, pero levántate y empieza, no pienses en nada, solo actúa, lo demás saldrá solo. Una vez has comenzado has superado lo más difícil.
Puedes utilizar la técnica del Pomodoro. Consiste en desmenuzar en partes una tarea que puede resultar larga o compleja, viéndola en pequeños trozos más alcanzables y haciendo pequeños descansos entre medias.
Para acabar quiero recalcar que en el fitness lo perfecto o lo ideal no siempre es lo más conveniente.
Por ejemplo: Sería perfecto hacer 8 ejercicios por sesión de entreno, entrenar a tope, ser muy estrictos con los tiempos de descanso y tener un foco mental extremo de principio a fin, pero…
Sería más conveniente hacer 4 ejercicios que no hacer nada, descansar el doble, si eso te anima a continuar por el cansancio, e incluso estaría bien perder el foco mental en los descansos hablando de anécdotas si te libera del estrés acumulado.
Busca estar siempre ligeramente por encima de tu nivel de reto “ligera salida de confort” si te pasas, te agobiarás, si te quedas corto te aburrirás, pero si te estimulas en el punto justo habrás conseguido el bonus de la mejora constante.
Desde Fitness a lo Bestia te animamos a buscar la excelencia y a intentar ser mejor cada día y recuerda que si quieres formar parte de nuestro equipo de atletas estaremos encantados de ayudarte con esa procrastinación para que tomes acción y mantenerte motivado.
